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domingo, 27 de octubre de 2013

MNCARS. Ana Grande López.


EL GUERNICA

Cuando una persona entra en un museo, sea cual sea, se convierte automáticamente en un espectador, un espectador que mira con atención las obras que allí se exponen independientemente de que sean o no, bajo su criterio, dignas de apellidarse “de arte”.

La primera vez que contemplé El Guernica, me pareció cualquier cosa menos una obra de arte, no entendía cómo alguien que dibujaba peor que yo, era considerado artista. Sin embargo, ahora cuando miro esta pintura mi opinión es totalmente diferente, y esto me pasa porque conozco el porqué de este cuadro tan feo.

Su autor, el malagueño Pablo Ruiz Picasso, no otorgó a esta creación el valor artístico que yo personalmente siempre he esperado de una obra. El verdadero sentido de esta pintura sólo es perceptible si se conoce la historia y se “entiende” el sentimiento que desde el primer momento han tratado de recoger las líneas esbozadas.

El contexto histórico de la obra es el de la Guerra Civil española, de ahí que la pintura sea simbólica y transmita el drama, el dolor, y la tristeza de lo que un conflicto que enfrenta a miembros de una misma familia supone. Fueron unas fotografías del bombardeo que sufrió la villa vasca de Guernica en abril de 1937, lo que inspiraron a Picasso. El bombardeo lo llevaron a cabo los aviones alemanes, que atacaron dicha zona sin motivos militares o estratégicos, simplemente con el pretexto de probar su armamento ante una posible Segunda Guerra Mundial. El cuadro no es narrativo ya que no refleja tal atroz suceso.

La pintura es abstracta y responde al estilo cubista característico del artista, quien renuncia al color para acentuar el dramatismo. La composición se distribuye a modo de tríptico. Con cada personaje Picasso transmite un sentimiento, el sentimiento que tiene el pueblo cuando sufre una guerra. De este modo representa emociones como el dolor, la impotencia, la muerte de inocentes, o el miedo.

Picasso realizó esta obra por encargo del Gobierno de la República Española, para que fuera expuesta en la Exposición Internacional de París de ese mismo año. Finalizada la Guerra Civil, y con la derrota del bando republicano, el cuadro viajó a Nueva York para ser custodiado en el MoMA (Museum of Modern Art). Allí permaneció, por deseo expreso del autor, hasta que en 1975 tras la muerte de Franco, se volvió a instaurar la democracia en España. Sin embargo, el cuadro no llegó a nuestro país hasta 1981, donde fue expuesto, en un primer momento, en el Casón del Buen Retiro, despertando allí una gran expectación. Diez años más tarde, en 1991, fue trasladado al Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía, lugar en el que aún se encuentra. La ubicación de la obra ha sufrido cierta polémica, ya que ha sido reclamada por las tierras vascas con el argumento de ser una pintura suya, aunque su casa siempre haya estado en la ciudad de Madrid.

Conociendo esta información, el verdadero significado de la obra, me doy cuenta de lo valiosa que es. Ahora cuando miro el cuadro, imagino ese sentimiento que Picasso me ha querido transmitir a mí y a todo el mundo, un sentimiento que me crea rechazo y me conmueve.


Bibliografía

http://www.slideshare.net/piluchi/guernica-ampliado

Ana Grande López
  

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